La partida para remuneraciones de la administración nacional se recortó en términos reales un 4,3% frente a igual mes del año pasado. La tijera también pasó por las transferencias a provincias.
El 2025 comenzó con un nuevo ajuste sobre los trabajadores públicos. El informe de Ejecución Presupuestaria de enero que realizó Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) da cuenta de un nuevo recorte en las remuneraciones de la administración nacional, que en términos reales (descontada la inflación) fueron un 4,3 por ciento menores a las de igual mes del año pasado (piso histórico de gasto devengado). También se mantuvieron los recortes hasta una ejecución de casi cero en transferencias para inversiones de capital en las provincias.
La licuación de ingresos, que se registró tanto en el ámbito privado como público, signó la política de todo el año pasado y se reactiva y profundiza en el inicio de este año. En el anticipo de lo ejecutado en el primer mes del 2025 se registra un fuerte recorte en remuneraciones, que incluye sueldos y salarios; contribuciones patronales; prestaciones sociales y beneficios y compensaciones.
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Este ajuste a los empleados públicos, junto a las erogaciones de capital y la postergación de pagos de vencimientos de deuda, explica el ajuste del gasto en enero. El Gasto Total de la Administración Nacional (base devengado) disminuyó en enero en términos reales (ajustado por inflación) un 14,2 por ciento interanual.
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“Esta contracción se explica por la drástica disminución del gasto en intereses (-95,4 por ciento interanual real), que es consecuencia del cambio en el cronograma de pagos de los títulos públicos y de los préstamos”, señala el informe de ASAP. Si se excluyen estos pagos arrojaría un incremento del 20,8 por ciento respecto a enero de 2024.
El recorte se muestra aún más grosero si toma en cuenta que la base de comparación fue el primer mes completo del gobierno de Javier Milei, cuando todavía muchas de las políticas públicas precedentes, reflejadas en los programas presupuestarios, se encontraban paralizadas y/o en proceso de revisión. El año pasado los salarios públicos perdieron entre 25 y 27 por ciento según la dependencia oficial o el organismo descentralizado del que se trate.
Los más ajustados del 2025
Los conceptos con mayor peso en el total del gasto presentaron comportamientos dispares. Las Prestaciones de la Seguridad Social continuaron con el crecimiento observado en los meses previos (34,6 por ciento interanual real), “producto de la recuperación de las jubilaciones y pensiones”. Por último, las Transferencias corrientes crecieron un 13 por ciento, mientras que las transferencias a Universidades lo hicieron en un 10,6 por ciento interanual.
“Si bien el Gasto de Capital creció un 4,4 por ciento interanual. ajustado por el índice de precios, el nivel de ejecución observado es de 49.397 millones de pesos, considerablemente por debajo del promedio de ejecución mensual de $185.000 millones que se verificó en 2024, año donde la inversión pública fue drásticamente reducida”, de acuerdo con el relevamiento de ASAP
En enero se mantuvo la brecha positiva entre las tasas de variación interanual de los ingresos y de los gastos totales, con los primeros evolucionando por encima de las erogaciones.
La ejecución del Presupuesto arrojó entonces resultados primario y financiero superavitarios de 3,68 billones y 3,57 billones de pesos, respectivamente. “En la ejecución del presupuesto no se reflejan los intereses capitalizables correspondientes a las Letras Del Tesoro Nacional Capitalizables (LECAPs) emitidas desde abril del corriente ejercicio, así como las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI) en el mes de julio, como parte de la operación de traspaso de la deuda del BCRA al Tesoro”, explica el informe.
Si esos instrumentos tuvieran el esquema más convencional, que implica el pago efectivo de los intereses generados, habrían impactado en el resultado financiero.
Los ingresos también se ajustan
Durante enero los Ingresos Totales de la Administración Pública Nacional (APN) crecieron un 1,1 por ciento respecto de los obtenidos durante el primer mes de gestión de 2024, ajustados por inflación. Los Ingresos Impositivos presentaron una variación interanual negativa de 12 por ciento interanual real.
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Dentro del menú de impuestos, los derechos de exportación presentaron una variación negativa del 53,9 por ciento interanual real que se explica por la alta base de comparación de enero 2024 cuando, como consecuencia del salto devaluatorio de diciembre 2023, se liquidaron exportaciones que no se realizaron en los meses previos. No obstante, en términos nominales la recaudación de este tributo durante el presente mes se mantiene en línea con la observada durante el último trimestre de 2024.
Por el impuesto PAIS, el ingreso residual significó durante enero apenas 2.680 millones de pesos, con una caída de 99,6 por ciento interanual, producto de la eliminación del tributo desde el 31 de diciembre pasado. Ganancias, en sentido contrario, durante enero tuvo una variación positiva de 37,9 por ciento interanual, como consecuencia de la ampliación de la base del tributo operada durante 2024, donde cerca de dos millones de trabajadores volvieron a ser alcanzados por el impuesto.
